¡Hola Sergio! era para pedir información sobre los reportajes de comunión. Explícame… ¿Cómo va?.
Esta misma fue la frase de contacto con una de las madres que se acercó al estudio, interesada en el reportaje de fotos para su hija. En otras muchas ocasiones podría ser un padre, una abuela, un tío… o tu caso!. Si me pongo en vuestro lugar, llegaría posiblemente a hacerme la misma pregunta. Pues que no se pare el mundo amigos, estaros tranquilos, todo es más fácil de lo que parece y yo tengo la respuesta.
Si me mandáis un correo, un WhatsApp… puedo enviaros directamente el dossier. Si, claro que lo haré. Ahora solo os pido unos minutos, quizás al final de estas líneas vuestras preguntas desaparezcan y a la hora de visionar el dossier, os será familiar.
Persigo una fotografía sin disfraces. Cuando os decidís a confiarme el reportaje de comunión de vuestros peques es porque encontráis reflejadas en ellas la esencia de los protagonistas. Una mirada. Un gesto. Su sonrisa. Ya sea en la sesión de estudio o de exteriores, mi forma de interactuar con ellos siempre va a ser bajo estas premisas y respetando la naturalidad que los caracteriza. Son niños. Vamos a centrarnos en la idea de que lo importante son las fotos; el resto ya vendrá después.
La sesión de estudio
Antes de la sesión siempre os invito a una entrevista previa, donde me encantaría conoceros a vosotros y al protagonista. Os mostraré el estudio y las posibilidades creativas para el reportaje. El día de hacer las fotos todo será más familiar para ellos y se sentirán como en casa.
Las sesiones están pensadas para ser dinámicas y divertidas: ¡el tiempo os pasará volando!. Mi forma de trabajar respeta la esencia de los pequeños, dejando que sean ellos mismos. Desde el principio, guiaré sus movimientos de forma natural, permitiendo que su espontaneidad brille a medida que avanzamos. El objetivo es darles a los más pequeños todo el protagonismo. Disfrutaréis de primeros planos que capturen la profundidad de su mirada, los pequeños gestos que los hacen únicos… Detalles como la textura de su vestido o el brillo de su traje. Las imágenes no serán solo recuerdos, sino también momentos llenos de emoción y significado, diseñados para perdurar en el tiempo.
Durante todo el proceso, estaréis presentes, disfrutando cada momento desde primera fila y compartiendo vuestras sugerencias. Juntos, crearemos algo realmente especial.
Si tienen hermanos, ellos también son bienvenidos a formar parte de la sesión. Es una buena oportunidad para capturar la complicidad y los momentos únicos que comparten juntos. Y no solo ellos, vosotros también seréis parte. Tengo por costumbre finalizar la sesión con una foto de familia. Y que no se me olvide, en mis sesiones de comunión las mascotas también tienen su lugar. Y es que cada detalle cuenta para crear un recuerdo que sea realmente único. Las fotos deben reflejar quiénes son y lo que les hace felices.
En mi fotografía la clave es sencilla: menos, es más. Me decanto por experimentar con diferentes texturas de fondos, jugar con la luz y que esos elementos sean los que den un plus de fuerza a las imágenes. La fotografía que os ofrezco en mis sesiones de estudio de Comunión tiene un estilo propio: natural, con un toque pictórico y siempre centrada en capturar la esencia de cada niño. Más que hacer fotos, busco crear un ambiente donde ellos puedan expresarse, sentirse cómodos y disfrutar del momento.
Mi propósito es crear un reportaje de comunión único, lleno de detalles y emociones, que se convierta en un recuerdo inolvidable para vuestra familia. Dedico todo mi cuidado y cariño a cada sesión para que tanto vosotros como vuestros hijos disfrutéis de una experiencia especial.
Diseño ambientes, pequeños mundos llenos de magia, donde los protagonistas se sienten como en casa. Me intereso por sus aficiones, por sus gustos. Y es que para mí, cada detalle cuenta: su osito favorito, una muñeca especial o ese objeto que tanto les gusta. Si la música forma parte de su vida, podemos integrarla en la sesión para hacerla aún más personal. En el estudio hay un piano que suele convertirse en una experiencia mágica para los más pequeños. Si tocan el violín, la guitarra o cualquier otro instrumento, están más que invitados a traerlo. Si es un amante de los libros, podemos crear un rincón mágico lleno de historias, donde se sienta rodeado por su mundo de imaginación acompañado de su “inseparable” amigo de peluche… ¡Las opciones son infinitas!.
Mi propósito es crear un reportaje de comunión único, lleno de detalles y emociones, que se convierta en un recuerdo inolvidable para vuestra familia. Dedico todo mi cuidado y cariño a cada sesión para que tanto vosotros como vuestros hijos disfrutéis de una experiencia especial.
La sesión de exteriores
Hay familias que prefieren hacerlo todo antes de la comunión, aunque por lo general optáis por llevarlas a cabo días después de la celebración, opción que os suelo recomendar. Estas sesiones os las planteo como darnos un paseo, de ahí es de donde nacerán las fotos que cuenten la historia. Incluso os doy la opción de que en esta sesión el vestuario sea informal, de esta forma conseguiremos una fotos atemporales.
En días soleados, nos daremos ese paseo a última hora de la tarde, cuando la luz nos brinda los mejores matices; si el día esta nublado, no pasa nada, es el mejor plan b, conseguiremos imágenes con la misma fuerza y sensibilidad. Vosotros elegís las localizaciones: playa, montaña, ciudad… lugares que por un motivo u otro les tengáis cariño. En cualquier sitio se puede contar una buena historia. Por otro lado, si es preciso, os recomendaré ubicaciones en las que ellos, y vosotros, os sentiréis cómodos.
Dentro de estas sesiones sois todos los miembros de la familia bienvenidos, incluyendo vuestra mascota en el caso de que disfrutéis de su compañía, también seréis parte de la sesión.
Los detalles
Una vez realizadas las fotos, pasaremos a la segunda parte del reportaje. Lo importante ya está hecho: las fotos.
Os doy la posibilidad de disfrutar las fotografías en papel, al tamaño que vosotros queráis; de tener unos recordatorios dignos para entregar a vuestros invitados en papel reciclado, lino, saco…; podréis aplicar las fotos sobre otros elementos como la madera, el cristal… No sabéis lo bonito que os puede quedar en casa una foto laminada para colgar directamente en uno de los rincones de vuestra casa donde ellos serán los protagonistas.
La de cosas que se pueden hacer… no os lo podéis imaginar, por ello os invito a que os acerquéis por el estudio y estaré encantado de mostraros todo con calma. Si queréis saber más sobre los detalles para invitados, os lo explico AQUÍ.
El álbum
La guinda del reportaje. Con todas las fotografías seleccionadas os confeccionaré un álbum a medida. Las fotografías están impresas sobre el propio papel, es el conocido `álbum digital´. Totalmente personalizado: con el nombre del niño, material de encuadernación, color… Os doy la opción incluso de añadir más páginas y seleccionar las fotos que darán vida a su interior. Es vuestro álbum. Si queréis saber el tipo de álbum que puedo confeccionaros, podéis pasaros por AQUÍ.
